Tras varios intentos fallidos, los gobernadores del país lograron, en la cumbre de San Andrés, el espaldarazo del Gobierno Nacional para presentar la reforma tributaria territorial, que buscará mayores ingresos propios.
Según la Federación de Departamentos, los actuales ingresos son insuficientes y obsoletos, porque dependen de impuestos al consumo de cigarrillos, licores y cerveza.
En San Andrés, el presidente Juan Manuel Santos se comprometió a apoyar la iniciativa y, el martes en la noche, el ministro del Interior, Fernando Carrillo, mencionó la reforma tributaria territorial, dentro del paquete de ocho proyectos que llevará el Gobierno a la legislatura.
Los gobernantes establecieron, de inmediato, una comisión que ya elabora la propuesta, con la expectativa de presentar el proyecto de ley en abril. Los departamentos ya han hecho varios planteamientos relacionados con impuestos como IVA, renta o patrimonio (ver recuadro).
Para el director de la Federación, Germán Chica, es contradictorio que “los departamentos impulsen campañas para disminuir el consumo de los productos que le generan rentas”. Según el gremio, la desigualdad marca las rentas departamentales.
“Hoy, de cada 100 pesos que un colombiano aporta en impuestos a través de los tributos nacionales, 82 llegan a las arcas del Ministerio de Hacienda, seis a la Gobernación y 12 al municipio”.
Entre los congresistas hay divergencia. El representante Simón Gaviria dice: “La descentralización requiere una segunda generación de reformas. Solo, debe ser un sistema integral de tributos, de manera que se puedan eliminar ciertos gravámenes antitécnicos como las estampillas”. Y su colega Hernando Padaui: “Los departamentos fueron fortalecidos con la reforma de las regalías.
En algunos casos disponen de un 50 y hasta un 100 por ciento más para invertir. Creo que el Gobierno les ha cumplido a las regiones. Claro, no desconozco que se necesitan más ingresos”.
Horacio Ayala, exdirector de la Dian, estima que “se requiere tecnificar y optimizar los métodos de liquidación y cobro del impuesto a la tierra. Si se consigue racionalizar y generalizar los avalúos catastrales para mejorar los recaudos del predial, se lograría un gran avance. De la misma manera, optimizar el recaudo del impuesto de vehículos”.
El excontralor y director académico del Observatorio del Caribe, Antonio Hernández, dice que ya se hizo un estudio donde se proponían varias alternativas: “La sobretasa a la gasolina debe ser un impuesto específico y no un porcentaje del precio; el grado de alcohol de los productos debe ser el que se grave, y no el nombre de los licores; y gravar más la tierra improductiva, para estimular mejor su uso y lograr mayor capitalización”.
Tomado de:portafolio.co
