Aunque tiempo atrás encontrarlas como líderes de sectores económicos era algo singular, cada vez son más las mujeres que ocupan posiciones de poder en gremios que, en muchas ocasiones, están dominados por hombres.

No se trata de una lucha de género, sino de que cada vez más féminas se preparan y dedican su carrera profesional a escalar para verse “de tú a tú” con los empresarios más poderosos del país y sentar, de esta manera, precedentes para sus pares.

Pese a que en Colombia no hay estudios que ahonden formalmente en la situación de género en los gremios locales, un sondeo realizado por Portafolio encontró que de las 55 asociaciones de carácter nacional más importantes del país, 15 son encabezadas por mujeres, lo que significaría un liderazgo femenino del 27,3 por ciento.
 

Lo más interesante es que, entre ellas, varias están a la cabeza de sectores cuya composición mayoritaria es masculina.
 

Es el caso de María Mercedes Cuéllar, presidenta de Asobancaria, quien dice que no ve ninguna diferencia en el trabajo según el género. “Hoy día la mujer se está abriendo espacios muy grandes; en ciertos sectores es impresionante. Sí pienso que podría tener una participación más activa, sobre todo en la medida en que se están capacitando, incluso más que los hombres”, afirmó.
 

Por su parte, Sandra Forero, presidenta de la Cámara Colombiana de la Construcción (Camacol), dice que los conocimientos, el buen manejo de las relaciones interpersonales, y las habilidades de negociación y comunicación serían los secretos tras la buena gestión de las mujeres.

“En el sector de la construcción cada vez hay más mujeres trabajando en labores que tradicionalmente eran de hombres. Ellas merecen un gran reconocimiento porque son luchadoras que se han ganado el respeto y la admiración de sus compañeros”, aseguró.
 

Lo que falta
 

Uno de los principales desafíos que deben superar las líderes es lograr el balance adecuado entre vida laboral y personal, especialmente cuando deciden ser madres. “Este es un sector de una exigencia intensa, y eso implica un reto para mí y todas las mujeres que trabajamos aquí”, testificó Claudia Velásquez, quien lleva 10 años a la cabeza de la Asociación de Transportadores Aéreos Colombianos.
 

Al respecto, Sandra Idrovo, profesora de Inalde Business School, recomienda que las entidades sean más flexibles con las mujeres, para así no perder el valioso aporte que ellas pueden dar en las altas cúpulas. “Las motivaciones de las mujeres para ascender son distintas a las de los varones. A ellas les importa mucho su satisfacción personal”, recordó la experta.
 

De esta manera, más mujeres podrán sumarse a la cruzada en pro de la buena gestión, un esfuerzo que va más allá del género.

Tomado de:portafolio.co