Se trata de la ley de último empleo, en la que se promueve la reintegración laboral de personas mayores de 50 años que, por su edad, han sido injustamente excluidas del mercado laboral colombiano y que buscan una oportunidad para alcanzar una pensión, destaca la propuesta.

Para estimular a las empresas a que contraten a esta franja de la población, se crea un beneficio tributario que consiste en una deducción del 12 por ciento del total de los pagos laborales realizados durante el período gravable a estos trabajadores y, además, del 12 por ciento del impuesto sobre la renta.

El proyecto sería el complemento de la ley de primer empleo, que también crea estímulos para que los jóvenes sin experiencia encuentren menos dificultades para engancharse en un trabajo.

También se incluye un artículo para establecer un esquema de contratación en caso de una emergencia, como la pasada ola invernal del 2011.

“El proyecto señala que tendrán prioridad al empleo de emergencia las madres o padres cabeza de familia afectados por la situación de desastre Nacional declarada”, indicó Simón Gaviria, que ha impulsado la iniciativa.

Tomado de: Portafolio.co