¿Cuándo el nombre de una marca se convierte en imagotipo?


Cuando el logotipo o nombre de la compañía resulta como un añadido. Tomemos nuevamente el ejemplo de Nike: la señal de la «v» se ha vuelto tan reconocible que el propio nombre ha sido eliminado para marcar sus productos. Las zapatillas que distribuye por todo el mundo aparecen sólo con ésta señal. El primer símbolo apareció en 1971, cuando la palabra ‘Nike’ (diosa griega de la victoria) se imprimió en color naranja en forma de trazo de un ’visto’ (V), indicando señal de lo positivo. La fuerza de este grafismo, su simplicidad y su impacto visual lo han convertido en un imagotipo.


Uno de los grandes aciertos de Marlboro fue la creación de su cajetilla dura y el inconfundible trapecio rojo en su parte superior. Sin duda, este imagotipo le permitió aprovechar oportunidades creativas para difundir mensajes visuales claros, sin tener que recurrir a la utilización de textos o nombres, más ahora cuando la legislación de muchos países prohíbe la publicidad de cigarrillos y licores a través de la televisión y otros medios de comunicación masiva. 



¿Qué diferencia hay entre identidad visual, imagen corporativa y apariencia global?


Identidad visual, imagen corporativa o apariencia global significan lo mismo: representación gráfica de una compañía que se proyecta al público a través del  símbolo o un diseño tipográfico.


La combinatoria de los elementos visuales (nombre, símbolo, tipografía, gama cromática y el sistema de señalización), dan la apariencia global y se constituyen en la expresión física de la empresa en los mercados donde concurre.


El símbolo de McDonald’s se inspiró en las señales en forma de arco que aparecían junto a los restaurantes. Se unieron dos arcos para formar la “M” y el resultado fue una identidad visual que resultó más elegante que el cocinero “Speedee” que habían utilizado en sus inicios (1948).



¿Qué relación tiene el imagotipo con los símbolos que representan un país? 


Para representar sus valores, metas, historia o riquezas, un país adopta símbolos mediante los cuales se identifica y se distingue de otros, además de aglutinar en torno a ellos a sus ciudadanos y crear un sentimiento de pertenencia. Los símbolos nacionales por excelencia son: la bandera, los colores nacionales, el escudo de armas y el himno. 


Un buen ejemplo de pertenencia lo protagonizaron los aficionados colombianos que viajaron a Brasil con motivo del Campeonato Mundial de Fútbol el pasado junio cuando continuaron entonando el himno nacional después de que la pista musical dejó de sonar en el estadio Mineirao de Belo Horizonte. La camiseta amarilla de la selección se convirtió en otro símbolo nacional.


México por ejemplo tiene un símbolo que está constituido por el águila mexicana con las alas desplegadas en actitud de combate. La garra izquierda sostiene un nopal florecido que nace en una peña que emerge de un lago.


Dos ramas, una de encino al frente del águila y otra de laurel al lado opuesto, forman entre ambas un semicírculo inferior y se unen por medio de un listón dividido en tres franjas que, cuando se representa el Escudo Nacional en colores naturales, corresponden los de la Bandera Nacional (verde blanco y rojo).


El símbolo de Argentina está dividido en dos campos: el de la mitad superior es azul y el de la mitad inferior es blanco (los colores la bandera). 


Dos manos simbolizan la unidad del Río de la Plata, antecedentes directos de la actual República Argentina y el gorro frigio que simboliza la libertad. El sol naciente representa la nueva nación. Los laureles significan la victoria. La cinta representa la nacionalidad argentina y la lucha por la dignidad e independencia de la humanidad, que se emblematiza en los colores de un cielo diurno.

 

Ricardo Gaitán

Analista de marca

Tomado de: https://www.larepublica.co/imagotipo-estrategia-%07de-las-marcas-para-sustraerse-del-nombre-parte-ii_149226